En el año 2125, la humanidad había alcanzado un nivel de tecnología y progreso sin precedentes. Sin embargo, detrás de la fachada de prosperidad y avance, se escondía una siniestra verdad.
La Dra. Yazmín Amairani, mexicana de 35 años, brillante científica con estudios sobresalientes en matemáticas e inteligencia artificial cuántica, había dedicado parte de su vida a estudiar los patrones de predicción de causas de muerte y enfermedades en la población humana de los últimos 300 años.
Haciendo uso de las computadoras cuánticas de uso general a las que tenía acceso en la unidad de investigación a la que estaba asignada en la Universidad de Estudios Superiores de América con sede en México, una de las tres universidades del continente americano que contaba con este tipo de tecnología, notó algo anormal en los datos de salida: parecía haber un patrón repetitivo en la forma en que las personas morían.
Al principio, pensó que era solo una coincidencia, pero cuanto más investigaba, más convencida estaba de que algo estaba mal. La incertidumbre la inundaba, pues las muertes parecían estar relacionadas con ciertos eventos y lugares específicos. Comenzó a sospechar que algo o alguien estaba detrás de estas muertes.
En un principio le provocó un pánico, ya que había leído sobre las antiguas teorías de conspiración que proliferaron en el siglo XX, y que hablaban de que la humanidad era una especie de “Granja Humana”, intentó concentrarse en la investigación que estaba realizando.
Pero una noche, mientras trabajaba en su laboratorio, la doctora tuvo una epifanía. Recordó una conversación que había tenido con un colega fallecido años atrás y en circunstancias misteriosas y que estudiaba a fondo la teoría de que la humanidad podría estar siendo criada por una raza superior. Al principio, pensó que era una idea ridícula, pero ahora al ver los patrones no estaba tan segura.
Comenzó a investigar más a fondo y descubrió que los patrones de muerte se correspondían con los ciclos de energía de una fuente desconocida. También encontró evidencia de que la Tierra estaba siendo sometida a una forma de explotación energética. Comparó estadísticas sobre el aumento de las muertes, los índices de suicidio, depresión y actividades en las que el ser humano hacía uso de su energía física y mental.
Y con un terror indescriptible la Dra. Yazmin correlacionó todos los datos que tenía a su disposición y se dio cuenta de que la humanidad no era la dueña de su propio destino. Estaban siendo criados como ganado, “una granja de energía humana” como a ella lo llamó, y dónde su energía vital era la fuente de poder para una raza superior.
Con esta terrible verdad, Yazmín se convirtió en una amenaza para los “verdaderos dueños” de la Tierra. Debía encontrar una forma de escapar al cruel destino del ser humano que había descubierto y alertar a la humanidad antes de que fuera demasiado tarde.
La lucha por la libertad había comenzado. ¿Podría Yazmin cambiar el curso de la historia y liberar a la humanidad de su yugo?, o ¿La humanidad estaba condenada a ser sometida por siempre?
Fecha: 15-10-2025 / 03:33
Ilustración: Generada por Meta AI
Autor: Guillermo Camarena ∴
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