He notado que la manifestación de estás “naves” (OVNIS-UAPS) a lo largo de la historia ha tenido una evolución en su manifestación gráfica por así llamarlo, ante los ojos de aquellas personas que han tenido la suerte de encontrarse con este fenómeno frente a sus ojos.
Al igual que nuestras tecnologías en nuestros medios de transporte, construcciones, aparatos etc., que han ido a avanzando y evolucionando conforme al contexto de las cada época y relacionado muy íntimamente con las tendencias y gustos de las personas, las formas, colores y materiales con las que el fenómeno OVNI se ha manifestado durante el paso de los años, también ha ido evolucionando tomando distintas formas, pero cumpliendo con el mismo fin, que es la manifestación ante ciertas personas, en ciertos momentos, en ciertos lugares y en ciertos tiempos.
“… Entonces quizá no son objetos, ni vuelan, ni están no identificados.” – Jacques Vallèe
Es así que podemos decir y afirmar que el fenómeno se ha ido adaptando al contexto de la época en la que se manifiesta.
Así tenemos:
- Bolas de fuego, carruajes de fuego, torbellinos, neblinas, nubes iluminadas, bólidos, estrellas, “soles y lunas”, etc. (como narran muchos textos de la antigüedad).
- Signos en el cielo (muy parecidos a los símbolos religiosos, como cruces, esferas, cadenas, coronas, flechas, etc., haciendo referencia al Fenómeno celeste en Núremberg)
- Nubes con formas caprichosas (representaciones que han quedado grabadas en pinturas antiguas y que la gente interpretaba como portentos y señales divinas).
- Extraños globos, barcos voladores, dirigibles misteriosos o dirigibles fantasmas (oleada de 1896-1897).
- Orbes, bolas de luz o plasma (Foo Fighters en la Segunda Guerra Mundial).
- Innumerables naves voladoras de distintos tipos, formas y propulsiones (en 1978, oleada en Brasil, Colares, en Pará, investigada y bien documentada por la Fuerza Aérea Brasileña, FAB, con el nombre de Operación Prato).
- Naves de aspecto metálico en forma de platillo (Kenneth Arnold, 1984, después de la Segunda Guerra Mundial)
- Platillos volantes de aspecto metálico que aterrizaban en muchas ocasiones y con formas poco estilizadas (con antenas, patas, hélices, escapes sacando humo, ventanas en forma de ojo de buey o cuadradas, puertas deslizantes, escalerillas, etc.) componentes muy parecidos a los medios de transporte humanos muy arcaicos de esa época.
- Naves en forma de triángulos camufladas (muy parecidas a los primeros aviones espías estadounidenses en la oleada OVNI belga, 1989-1990)
- Platillos volantes o naves con formas estilizadas (comienza la era de los objetos y formas estilizadas, y en el mundo comienza a usarse el estilo minimalista con tendencias futuristas en edificios, muebles, autos, etc.)
- Objetos presentes en eventos astronómicos (eclipse de total de Sol en México, 1991).
- Luces en forma de esferas, flotillas de miles de esferas, y objetos con formas definidas, pero de materiales no sólidos como (plasma, energía, luz, rayos, etc., presentes en grandes ciudades del mundo ante miles de personas y video grabadas).
- Actualidad (sombras, nubes caprichosas con destellos, manifestaciones en volcanes, tormentas, objetos traslúcidos, objetos sobrevolando bases militares, centrales nucleares, en fenómenos naturales como tormentas, tsunamis, etc., o con la capacidad de transparentarse o cambiar de forma).
- Objetos, formas, destellos, sombras, etc., (que solo se captan con cámaras infrarrojas o de visión nocturna, etc., en todo el mundo gracias a la proliferación de cámaras de seguridad en miles hogares).
Como vemos en la lista anterior, hago un pequeño resumen de los ejemplos a los que me refiero con el título de esta reflexión, (y digo pequeño porque los ejemplos son miles y quizás se me escape mucho por enumerar cronológicamente).
Pero solo lo hago a modo de ejemplo y no como una investigación rigurosa ni documentada ya que la idea de este pequeño escrito es que la persona que lo lea, piense más allá sobre la manifestación de este fenómeno, que no solo es ver platillos volantes y marcianitos verdes, sino que el fenómeno tiene una connotación más profunda y compleja de lo que parece.
— G.·. C.·.