LOS DIOSES QUE LLEGARON DEL CIELO
En una Fabulosa altiplanicie, a 4000 metros, teniendo como marco El misterioso lago Titicaca, se encuentran los vestigios de una civilización desconocida que, según la opinión de muchos especialistas, encierra la clave para descifrar la historia más antigua del hombre. Para los mismos incas esta región siempre me presentó un Enigma impenetrable.
Ellos se limitaron a conquistarla, cuando ya era un campo de ruinas gigantescas, pero no pudieron saber a ciencia cierta que había ocurrido ahí en el pasado. Lo único que quedaba era montones de piedras labradas, algunos monumentos que se habían conservado milagrosamente y una serie de leyendas preservadas por la tradición oral de los pequeños grupos aborígenes que aún vivían en el lugar.
En 1532, los conquistadores españoles conocieron también esas ruinas y esas leyendas, pero nada pudieron hacer para descifrar su mensaje. Sin embargo, les llamó poderosamente la atención el hecho de que los indios les dieron el nombre de “Viracochas”. Indagando sobre el origen de este nombre, los primeros Misioneros se enteraron que la tradición indígena hablaba de una raza de seres desaparecidos, hombres gigantescos y de raza blanca que habían dejado del cielo para establecer su imperio a orillas del lago sagrado.
Según esa misma tradición los “Hijos del Sol” habían reinado en Tiahuanaco durante milenios, enseñando a los hombres todos los secretos de su ciencia. Pero, un día desaparecieron de golpe y regresaron al cielo, con la promesa de que volverían a esta tierra sagrada.
Los cronistas españoles que escucharon está leyenda de boca de los indios conquistados, creyeron que se trataba de una fábula pagana sin ninguna relación con la verdadera historia de ese país. Esto prevaleció en los siguientes siglos y la mayoría de los historiadores registraron la leyenda como parte de la mitología y la religión preincas.
Igualmente los antropólogos y arqueólogos contemporáneos que han estudiado el lugar no le dan a esa leyenda otro valor que puramente mitológico. Sin embargo, existen otros investigadores no oficiales, principalmente Louis Pauwels, Jacques Bergier y Erich Von Däniken, que interpretan la leyenda de los “Viracochas” desde un punto de vista totalmente distinto. Para ellos los “Hijos del Sol” son seres extraterrestres que vinieron a colonizar este planeta Estableciendo su base en el aeródromo de Tiahuanaco.
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