Patrick Rivière nos dibuja una historia viva de la Antigüedad: desde Sumeria, cuna de la civilización en la que nacerá la escritura, al Egipto faraónico, auténtico «don del Nilo» en el que los fastos religiosos alcanzaron un refinamiento máximo, para desembocar en la sabiduría de la Grecia antigua, madre del pensamiento filosófico, y en la influencia helenística que tuvo su proyección intelectual en la civilización occidental.
Mediante la descripción de los grandes mitos y las antiguas creencias, Rivière conduce al lector hasta el interior de los santuarios en los que tuvieron lugar los fabulosos misterios antiguos con la autenticidad de su pasado esplendor. Esta esmerada recuperación nos trasporta hasta el corazón de las preocupaciones de los cenáculos sagrados, permitiéndonos revivir el ambiente de los auténticos hogares de «iniciación», que tanto influirían luego en los artistas europeos de todas las épocas.